Desde mi teclado: Entre el silencio y la elocuencia
Por Juan José García Amaro.
En el terreno mafioso, el silencio de la mujer es fríamente sepulcral y calculador ante la brutal ejecución de su pareja, pues jamás pasan por alto que en muchos de los casos, ese es el destino inevitable, pero mientras llega la hora, disfrutan de las mieles que se derivan de las acciones ilícitas, por ello, una esposa nunca ha exigido justicia en cada crimen.
Sin embargo, eso no sucede en el terreno político, donde hoy, dos políticos, que fueron grandes amigos, íntimos e inseparables y que bajo las siglas del Partido Acción Nacional (PAN), salieron de la jodidez en la que deambulaban por las calles de Ciudad Juárez. Se trata de Javier Corral Jurado y Cruz Pérez Cuéllar.
Ambos sujetos, pese haber roto con su estrecha amistad, y con altura de miras, no desperdiciaron el tiempo y coincidieron en llegar al cobijo de Morena. El Primero, como virtual senador de la República, y el segundo, como alcalde reelecto de la gran Ciudad Juárez.
A esta fecha, Corral Jurado y Pérez Cuéllar, con sus presuntos actos de corrupción, se presumieron como los ‘riquillos’ de Chihuahua. El ex gobernador, discreto y con la hipocresía que lo caracteriza, se hizo de una librería, mientras que el flamante alcalde, estrenó por poco tiempo una mansión, que de acuerdo a la ley, no merecía.
Hoy que la justicia los alcanzó, sus mujeres no se quedaron calladas… Su elocuencia salió al quite para condenar las acciones persecutorias que se iniciaron en contra de sus maridos. Al ex mandatario se le abrió un proceso por enriquecimiento ilícito y defraudación fiscal, mientras que a Cruz Pérez, lo echaron de la mansión que presuntamente rentaba.
Al respecto, el fiscal Anticorrupción del Estado, Abelardo Valenzuela Holguín, informó que dicho inmueble y uno más, se le aseguraron a su propietario, Daniel Pando Morales, a quien se le abrió una carpeta de investigación por enriquecimiento ilícito, pues como empleado de ‘tercera’ en la presidencia municipal, adquirió las dos propiedades en el Campestre, las cuales, rentó al alcalde en 70 mil pesos mensuales.
Una vez que Javier Corral fue notificado de las acciones que se emprendieron en su contra, su esposa, Cinthia Chavira, a través de sus redes sociales, defendió a capa y espada a su consorte. “En un Estado de derecho ideal, imaginarte perseguido sería impensable”, dijo.
Mediante su escrito, dejó en claro que esto se debía a una venganza, producto de aquellas acciones contra la corrupción que emprendió en su administración, curiosamente, considerada como una de las peores, que hasta ahora, ha tenido Chihuahua.
“Mientras César Duarte anda libre y a sus anchas, su latrocinio parece haber sido condenado al olvido. Anima la esperanza de que muchos hoy saben quiénes son esos que requieren urgentemente lavarse la cara a costillas de la decencia de terceros. Yo sé quién eres tú. Así que… #Hastadondetope”, concluyó Chavira.
Cabe destacar, que la Secretaría de la Función Pública (SFP) abrió un procedimiento contra Javier Corral Jurado, por los probables delitos de enriquecimiento ilícito y defraudación fiscal. Delitos, que precisamente, ‘soñó’ combatir en el gobierno de Claudia Sheinbaum.
Mediante un comunicado, la SFP detalló que la primera denuncia fue presentada en febrero de 2022 por un diputado local (Omar Bazán Flores), respecto a la petición de investigación e información sobre la compra de un terreno.
A su vez, precisó que un presidente municipal (Cruz Pérez Cuéllar) presentó una denuncia penal ante la fiscalía de Chihuahua, en mayo del mismo año, por conductas de probable defraudación fiscal y falseamiento en declaraciones con el fin de defraudar.
“Las conductas advertidas se relacionan con sus declaraciones patrimoniales de modificación y de conclusión en su encargo como gobernador, es decir, no declaró un inmueble respecto del que se identifica como dueño, lo que se considera una falta administrativa grave”, apuntó la SFP.
Truena Rubí Enríquez contra el desalojo
“Reconozco que esta forma de mirar me mantuvo totalmente ocupada estos últimos tres años recorriendo cada rincón de mi querida Ciudad Juárez, mi hogar, donde he conocido a las personas más maravillosas, más amables y generosas con las que he trabajado de la mano y con el corazón por las mejores causas, que no vi…
“No me di cuenta del rostro mezquino de la política hasta que invadió los espacios más íntimos de mi vida familiar con la clara intención de dañar. Hoy solo quiero decirles que me niego tajantemente a aceptar esta forma de hacer política, como si la angustia fuera el precio que hay que pagar por querer hacer las cosas de la mejor manera y no entiendo, y mucho menos lo acepto.
“Porque en mi espíritu no caben la desesperanza y la intimidación, porque está lleno de gratitud, de su cariño, de sus miradas llenas de comprensión, de abrazos y sus bendiciones; que no da lugar a nada más que la esperanza compartida que se transforma en una poderosa fuerza que me empuja a seguir adelante, siempre de la mano de quien amo y admiro profundamente, que es mi esposo Cruz Pérez Cuéllar”, apuntó la esposa del alcalde.
El video que subió a sus redes sociales, se dio, tras el desalojo de que fueron objeto por parte del personal de la Fiscalía Anticorrupción de Chihuahua, en hechos ocurridos, el pasado 23 de abril, cuando los elementos estatales, ejecutaron las órdenes de embargo que otorgó un Tribunal de Control.
El operativo se llevó a cabo en dos propiedades ubicadas en la calle Fresno con los números 1564 y 1642 del fraccionamiento Campestre. En el primer numeral, habitaba Cruz Pérez Cuéllar. En sus intentos que ha realizado para regresar a la mansión, el Juez de Distrito ha rechazado sus solicitudes de amparo.