Por ataques a militantes del PRI y PAN, Alito y Marko exigen seguridad al gobierno federal

Por Juan José García Amaro.

Tras la ejecución del precandidato del PRI a la alcaldía de San Juan Cancuc, Chiapas, y el ataque armado a la casa de una ex dirigente estatal del PAN en Michoacán, los presidentes nacionales de ambos partidos, Alejandro Moreno y Marko Cortés, exigieron al gobierno federal que garantice la seguridad en este proceso electoral.

“En México, la violencia está fuera de control y hay incompetencia de las autoridades”, afirmó el presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno Cárdenas, al condenar el asesinato del precandidato del PRI, a la alcaldía de San Juan Cancuc, Chiapas.

Asimismo exigió a las autoridades federales y estatales que garanticen la seguridad en este proceso electoral para evitar que la delincuencia organizada sea la que elija el próximo 2 de junio, y que se realice una investigación expedita para aplicar toda la fuerza de la ley a los responsables de este asesinato.

A través de un mensaje en sus redes sociales, Alito Moreno  subrayó que las y los mexicanos vivimos en un país donde la violencia está fuera de control y hay incompetencia de las autoridades para imponer la ley y garantizar la paz en el territorio nacional.

Por su parte, la dirigencia nacional del PRI se unió a la condena por el asesinato de Diego Pérez Méndez e hizo un enérgico llamado a las autoridades para que esclarezcan los hechos y castiguen a quienes resulten responsables.

“El gobierno no puede seguir negando la realidad: los más de 110 hechos de violencia relacionados con el proceso electoral exigen que se tomen medidas para garantizar la seguridad y evitar que la delincuencia organizada sea la que elija el próximo 2 de junio, y no los ciudadanos de bien”, se indicó.

Condena PAN ataque a casa de exalcaldesa de Uruapan, Jesús María Doddoly

En otro evento violento aparentemente político que se registró en el estado de Michoacán, el presidente nacional del PAN, Marko Cortés Mendoza, condenó el ataque que sufrió Jesús María Doddoly Murguía, expresidenta estatal del PAN y exalcaldesa de Uruapan.

“El ataque a balazos de su casa, que ocurrió ayer a las 11 de la noche, nos habla del nivel de descomposición, de una estrategia que se ha quedado corta y de que el gobierno federal morenista de López Obrador está completamente rebasado”, apuntó el líder panista.

Tras el ataque que se registró contra la casa de la ex lideresa panista, quien descansaba en un sillón de su sala cuando un comando rafagueó la fachada, Cortés Mendoza, externó su indignación y preocupación por la amenaza que persiste en el país, donde más políticos son perseguidos y atacados por el crimen organizado.

“El crimen organizado y el clima de violencia sigue creciendo en el país frente al proceso electoral, cada semana hay más candidatas, candidatos, periodistas o políticos amenazados, asesinados, secuestrados y atacados por grupos de la delincuencia.

“Estamos alarmados porque pese a los intentos del INE por brindar seguridad a los abanderados, aún es insuficiente, el procedimiento es lento y en ese tiempo pueden estar vulnerables. Nuestros candidatos están luchando solos y contracorriente”, lamentó.

Incluso, agregó, la violencia criminal ha alcanzado a familiares de candidatos, ya no solo a ellos mismos, pues de acuerdo con un estudio publicado esta semana del proyecto Votar entre Balas, de Data Cívica, 113 familiares de políticos han sido atacados de 2018 a la fecha, de los cuales 78% han sido asesinados.

“Hacemos un llamado enérgico al gobierno a blindar las elecciones del crimen organizado, estamos llegando a niveles lamentables que tenían hace 20 años países como Colombia, donde los narcotraficantes asesinaban políticos y dominaban territorios enteros. “Ya basta presidente, pónganse a hacer su trabajo aunque sea los próximo seis meses que le restan de su gobierno y garantice la paz y tranquilidad en los próximos comicios, tanto para los que se disputarán el voto, como los funcionarios de casilla, encuestadores y todo el personal de los institutos electorales estatales”, concluyó.