noviembre 24, 2024

Raymundo Romero y Fernando zarandean a Javier Corral en restaurante de Chihuahua.

Al ser sorprendido en el citado lugar, donde comía con tres de sus amigos, Romero Maldonado y el ex diputado de MC, lo insultaron con ofensas de ‘alto calibre’, lo zarandearon y de un golpe en el pecho, propinado por Fernando Reyes, Corral cayó de puro trasero sobre el piso.

Por Juan José  García Amaro.

“Pinche viejo pendejo, no se me olvida lo que me hiciste el 24 de diciembre en la noche, estaba celebrando con mis nietos y con mis hijos. Cabrón, me agarraste a los 74 años (ahora) tengo 79”, expresó sumamente encolerizado Raymundo Romero Maldonado al insultar y bañar de vino al ex gobernador Javier Corral Jurado.

El ‘flamante’ asesor del eje anticorrupción de la aspirante presidencial, Claudia Sheinbaum Pardo, fue abordado de manera violenta por el ex secretario General de Gobierno de la administración de César Duarte Jáquez y por su yerno, Fernando Reyes, en el restaurante “Garufa” de la ciudad de Chihuahua.

Al ser sorprendido en el citado lugar, donde comía con tres de sus amigos, Romero Maldonado y el ex diputado de MC, lo insultaron con ofensas de ‘alto calibre’, lo zarandearon y de un golpe en el pecho, propinado por Fernando Reyes, Corral cayó de puro trasero sobre el piso.

Una vez que se levantó, ante la mirada de los ocupantes de varias mesas del exclusivo comedero de cortes argentinos, entre mentadas de madre, lo bañaron de copas de vino y vasos de agua, y le reprocharon por haberlos puesto tras las rejas en el marco del Operativo Justicia para Chihuahua.

Mientras el ex diputado Fernando Reyes fue detenido al ser acusado de haberse beneficiado de la –caja- de recursos públicos de Duarte Jáquez, su suegro, Romero Maldonado, fue acusado de ordenar la compra de un predio de 40 hectáreas en el Ejido El Llano, en Guachochi, en más de 20 millones de pesos.

De acuerdo a la causa penal 2723/2018, la adquisición del predio se realizó entre agosto de 2013 y abril de 2014. Para ello, el Comité de Patrimonio Inmobiliario pactó con José Manuel Chaparro Hinojosa, la compra del terreno, el cual tenía un valor real de 5.8 millones de pesos. Dos años después, el predio fue donado a la Sedena.

Por esta razón, Corral Jurado ordenó la detención de Raymundo Romero Maldonado. La noche del pasado 24 de diciembre de 2019, agentes ministeriales lo sacaron de su residencia y por órdenes del entonces gobernador, lo desnudaron en el patio del penal.

“Fue un maltrato, una tortura, me obligaron a desnudarme a una temperatura de cero grados o tal vez peor. Ni los calcetines me dejaron conservar, pese a que les dije que acababa de pasar por 41 sesiones de radio por el cáncer y tenía las defensas muy bajas.

“Que me hayan encuerado y que me hayan dado el trato que me dieron, es tortura física y mental, es una tortura que puedes acreditar y más por el caso de cómo me agarraron, me estrujaron, me violentaron por órdenes de un loco como Javier Corral”, recordó días después de que logró su libertad.

Resaltó que su “edad” lo ayudó a no estar preso, “también la enfermedad, pero además la acusación no tiene fundamento. Me pretenden acusar de tráfico de influencias, al estilo de la Fiscalía: dicen que este engendro del mal (Corral) hizo que firmaran todos los secretarios del gabinete de Duarte, un documento que pasó por el Comité de Patrimonio Inmobiliario, ya cuando habían pagado el terreno directamente en Hacienda”, apuntó.

Volviendo a su arresto, ocurrido durante la navidad del 2019, Romero Maldonado refiere que al salir de su casa a prender las luces navideñas, se acercó una mujer para pedirle un vaso de agua, “al invitarla a pasar, pedí que le sirvieran el vaso de agua y en eso, entra un hombre y entre los dos me sacan de la casa… Así ejecutaron la orden de aprehensión”, apuntó.

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